Se trata de la inflamación del hígado, órgano vital que se encarga de filtrar la sangre, producir bilis, procesar nutrientes, descomponer sustancias químicas, controlar el nivel de hormonas, entre otras funciones.
Suele ser una enfermedad a corto plazo, ya que desaparece espontáneamente, lo que se conoce como un cuadro agudo. En el peor de los casos, evoluciona como una patología crónica.
Puede ser producida por:
- Virus: hepatitis viral A, B, C, D y E
- Alcohol
- Drogas o fármacos
- Autoinmunidad: Ocurre cuando las células inmunitarias confunden a las células normales del hígado como invasores dañinos y las atacan.
El Dr. Harrison Franco, especialista de Help, explica que los síntomas de la hepatitis aguda son:
- Fatiga
- Orina oscura
- Heces pálidas
- Dolor abdominal
- Pérdida de apetito
- Pérdida de peso
- Decaimiento
- Piel y ojos amarillos, lo que puede ser signo de ictericia (coloración amarillenta de la piel o de los ojos causada por un exceso de bilirrubina en el cuerpo)
Los indicios de hepatitis crónica, como la B o C, se desarrollan de manera lenta y silenciosa, por lo que se presentan cuando el daño afecta la función hepática y solo es detectada a través de exámenes de sangre.
El tratamiento dependerá del tipo de hepatitis del paciente, si es aguda o crónica. Ambos tratan la enfermedad a base de medicamentos, dieta balanceada e hidratación.
En el caso de que sea por una infección, la persona deberá estar en aislamiento, para evitar la propagación del virus.
Para evitar la hepatitis, el doctor recomienda:
- Frecuente lavado de manos
- Tomar agua potable o envasada
- Siempre lavar las frutas y verduras
- No consumir drogas
- No compartir agujas o jeringas
- En el caso de la hepatitis B, usar preservativo en la relación sexual.
El especialista hace un especial llamado a recordar que existe la vacuna para la hepatitis A y B, siendo esta la mejor forma para prevenir la enfermedad: “Es muy importante que las personas se vacunen contra la hepatitis de manera oportuna. Así, tienen menos probabilidades de tenerla en el futuro”.
Cada 28 de julio se conmemora el Día Mundial de la Hepatitis. Aunque puede ser una enfermedad autoinmune, se puede evitar siguiendo los consejos del Dr. Harrison. Si presentas algunos de los síntomas mencionados, consulta con un médico lo más pronto posible.