Medicamentos para adelgazar sin receta: un riesgo real

¿Has oído hablar del Ozempic, Saxenda Recombinante, Zepbound o Wegovy? Los tres tienen algo en común: son medicamentos que durante los últimos años han alcanzado gran popularidad debido a sus efectos para bajar de peso de manera rápida en personas con sobrepeso, o en personas con obesidad, es decir, cuyo índice de masa corporal es sobre 30.

Hasta ahí ningún problema entendiendo que están regulados y que su tratamiento está recetado y controlado por un especialista médico para personas que realmente lo necesitan, como por ejemplo pacientes diabéticos.

Sin embargo, la tendencia mundial ha dejado en evidencia que este tipo de medicamentos están siendo utilizado por personas que no lo necesitan, sin supervisión médica ni información sobre los riesgos, generando una ola de enfermedades como arritmias cardiacas, pancreatitis (inflamación del páncreas), cólicos biliares, insomnio, hipertensión, irritabilidad, depresión, ansiedad, migrañas y el peligro de desarrollar cáncer de tiroides.

Lo que no se ve ni informan

Muchos de los medicamentos para bajar de peso, ya sea en pastillas o inyecciones, prometen resultados inmediatos, prósperos y transformaciones mágicas, pero ocultan los efectos secundarios debido a que en su composición se encuentran compuestos prohibidos o dosis fuera de las normas reguladas.

La promesa de un remedio milagroso no existe, por lo mismo, el jefe médico de Help Rescate, Dr. Ney Tello, entrega las siguientes recomendaciones.

– Antes de comenzar un tratamiento, acude a un especialista médico para una evaluación y realízate todos los exámenes que te solicite.

– Adquiere todos tus medicamentos en farmacias autorizadas por el Instituto de Salud Pública de Chile.

– No compres remedios para bajar de peso en el mercado ilegal o en canales informales como redes sociales porque podrían ser falsificaciones.

– Si tu médico te recetó algún medicamento para bajar de peso, ten en cuenta el objetivo del tratamiento y los posibles efectos secundarios.

– En caso de tener efectos adversos, informa lo más rápido posible al médico tratante.

Ten presente que los medicamentos no reemplazan el cuidado personal, la alimentación balanceada, el tiempo para realizar alguna actividad física y el descanso.